Mis cambios de humor

No sé si a alguien más le habrá pasado esto, pero en los últimos meses he notado que tengo unos cambios de humor tremendos, de pronto estoy súper feliz como me siento la mierda más grande de este planeta.
A veces estoy de un optimista insoportable, como me da por dramatizarlo todo. Me siento un poco bipolar :(
Tiendo mucho a pensar, en negativo sobre la operación, que no saldré de ella, porque es como si no viera futuro después, no me creo que a mi me pueda pasar algo tan bueno, como si no mereciera esta oportunidad. Cada vez que veo el  blog de alguna forera, y veo esos cambios tan espectaculares y esa felicidad que derrochan pienso que a mi no me pasará eso... Por qué? porque aunque esté ilusionada sigo cagada de miedo? o porque algo me está diciendo que no lo haga, que no saldrá bien?
Sé que hay posibilidades de no salir de la operación (un 1% creo) pero las posibilidades de que me quede tiesa por mi obesidad son todavía mayores. Y con ese dato me tengo que quedar.
Lo peor es que las 3 personas más importantes de mi vida (mis padres y mi marido) lo están pasando igual de mal que yo, y que les estoy haciendo daño con estos cambios. Sobre todo mi marido, con más paciencia que un santo y que intenta que no me vuelva loca, pero no sé si a costa de acabar él peor que yo... se tiene el cielo ganado...

Qué hago??!!

Llevo unos días pensando cómo comunicar que me van a operar, y que voy a estar de baja, en el trabajo... me agobio bastante al pensarlo, porque no quiero dar detalles de mi vida a mis jefes, no es que sea gente muy comprensiva que digamos.
En un principio había pensado operarme en mis vacaciones, pero ahora mismo, con la crisis, han despedido gente y estamos los justos, de modo que a la hora de coger las vacaciones no se puede coincidir con nadie, y eso va a ser un caos, no sé ni si quiera cuándo las voy a tener, y, sinceramente, me gustaría operarme antes del verano, estoy agotada de este sobrepeso, y mi familia empieza a pagar cosas que no tienen por qué, y me siento fatal.
Sé, que, diga lo de la operación o no, la siguiente en ser despedida soy yo, lo único que puede variar es el momento en que lo hagan. No sé qué decir cuando se lo tenga que decir, estoy muy agobiada, ojalá sirviera con decir "oye, que me van operar y voy a estar 2 semanas de baja"  :(
Todavía queda mucho para esto, pero no puedo evitar pensarlo, qué asco de cabeza que le da por pensar tanto!!!!

Primer paso, dado

Bueno, pues hoy he ido a mi médico de cabecera, para hablar con él y ver si me podía mandar él las pruebas preoperatorias.
Le he comentado la decisión que he tomado, me ha dicho que le parece muy correcta, y me ha mandado todas las pruebas, a excepción de la placa de tórax y una prueba de insulina porque, me ha dicho que él no las podía mandar (supongo que el endocrino sí podría mandarme todas)
Ahora estoy mirando en qué clínica privada me hago el análisis y la radiografía, y cuándo me puede costar...

Me siento muy animada, estoy deseando que pase todo, de empezar mi nueva vida, espero que los hábitos que me enseñen me sirvan y yo sepa aprovecharlos, es algo que me tiene un tanto preocupada, pero me temo que, hasta que no llegue ese momento, no lo sabré, claro.

Decisiones

Después de unos cuantos días dándole vueltas a las cosas, pensando (bueno, comiéndome la cabeza), llorando por las esquinas, sintiéndome como una mierda... Con la ayuda de mi marido y mis padres, he decidido que me voy a operar con el doctor Resa, en Zaragoza.
La decisión de hacerlo por privado viene, lógicamente, tomada por la eterna lista de espera que hay en la Seguridad Social (mínimo 2 años), tiempo que, con 31 años, y dado mi estado físico y mental, no quiero pasar de un lado para otro.
Me puse en contacto con Resa, hablé por correo electrónico, y posteriormente por teléfono. Tengo consulta con él el día 14 de abril; quiero conocerle, y hablar en persona, plantearle todas mis dudas y miedos, que son bastantes.
En un principio habia pensado operarme después del verano, pero estos días me he planteado el adelantar la operación, aunque sin precipitarme, por varios motivos: en todo este tiempo puedo seguir cogiendo peso, puedo acabar con depresión, cosa que no quiero ni por asomo, mi marido ahora está en paro, y, cuanto más tarde en operarme, más posibilidades tiene de estar trabajando, y que el día de la operación no esté conmigo, así que, hablándolo con mi psicóloga me recomendó que le fuera pidiedo las pruebas necesarias para ir adelantando. Y así lo he hecho.
Le envié un correo el jueves por la noche, y el lunes cuando me desperté ya tenía respuesta (yo no sé si este hombre no duerme, o tiene un séquito respondiendo emails, jeje). En este correo, aparte de las analíticas también me envió un cuestionario psicológico, las recomendaciones preoperatorias y la hoja para hacer las transferencias bancarias. El próximo viernes iré a mi médico de cabecera con todo para ver si puede él mandarme las pruebas, sé de casos que lo han hecho asi.
Estoy mucho más animada, ya voy dejando de llorar cada vez que hablo del tema operación, supongo que lo voy asimilando, razonando... es lo mejor para mí.